El que yo suelo llamar "binomio del equilibrio"(velocidad de obturación/ apertura de diafragma) en realidad no es tal, o mejor dicho, creo que no hay una fórmula mágica porque depende de varios factores: la velocidad de caida del agua y la luz del lugar. También influirá la profundidad de campo que queramos para nuestra fotografía y el, digamos, ambiente o atmosfera que queramos tenga nuestra imagen, reforzando sombras o recreando la explosión de colores.
Hay veces como en la imagen anterior en la que la toma es -uno así la concibió- minimalista, como es este caso, incluyendo pocos, muy pocos elementos compositivos, y la fuerza de la imagen recae sobre la propia agua, dejando el resto como meros apoyos narrativos.
En otros casos el agua es un elemento mas de la narración, no tan protagonista, y su papel es, al contrario, un apoyo narrativo en lugar del papel protagonista, como en la imagen siguiente, dejando que el protagonismo recaiga sobre el color de la planta del primer término:
El resto de los elementos, como el agua, son un sencillo acompañamiento.
En cualquiera de los casos la única diferencia vá a estar en la velocidad de obturación que empleemos. Trabajar en manual o en modo "prioridad a la velocidad" se impone. Los tiempos mas adecuados para que no se nos "queme" el agua -con una luz normal de día soleado- suele estar entre 1/10 y 1/15", salvo que empleemos un degradado neutro, lo que nos permitirá ir a velocidades mas lentas en el caso de que el agua no tenga demasiada velocidad de caida.
La verdad es que yo prefiero trabajar con esas velocidades, tripode imprescindible y mejor cable disparador, y poder utilizar diafragmas entre f/6,3 y f/8 (f/11 como mucho) que me ayudan a recrear el ambiente que busco:
La fotografía no deja de ser el "scenium" que uno ha elegido -una parte de él que delimitamos mediante el encuadre- y y es el fotografo el que debe de elegir los elementos que incluirá en su composición y donde quiere que recaiga, como comentaba antes, el protagonismo narrativo. En la siguiente estaba claro que el protagonismo era para el agua, su frescor, su alegría...., y que el resto no pasaría de ser el acompañamiento, lo mejor que las circunstancias permitan en cuanto a composición, luz, etc. Incluso en mas de una vez me he visto forzado a eliminar algún elemento que distrae: la típica rama inoportuna que cruza la imagen, una roca demasiado grande...mil cosas, incluso basura, que a veces algún desaprensivo ha dejado a la orilla.
Un saludo Jorreto, después de mucho tiempo, me he quedado un rato mirando tus fotos en esta entrada y e intentado verlas como alguien que no ha hecho una foto en su vida y no puedo decir nada mas que da un gustazo contemplarlas por la paz y frescura que me transmiten.
ResponderEliminarEncantado de volver a ver tu blog.
Todo un lujo tus explicaciones, Antonio, y una belleza las fotografías. Da gusto pasearse por aquí.
ResponderEliminarUn abrazo!
¡Hermosísimo trabajo, Iso Bajo! Y una se queda mirando... todo ese río de vida.
ResponderEliminarHas dado una clase magistral. Y yo te lo agradezco en el alma, he aprendido mucho de gente que, como tú, tiene un ojo exquisito acompañado de un lenguaje claro a la hora de captar una imagen.
ResponderEliminarGracias. Las fotografias excelentes, me voy a mirarlas otro rato.
Un beso
La conclusión que saco es que todo vale, ¿no? una exposición más larga, más corta; agua más sedosa, menos...siempre dependiendo de los factores que rodean la toma y del gusto del consumidor.
ResponderEliminarBuen post y mejores fotos :)
Buen finde!!
Hola Mariluz, creo que el denominador comun es la velocidad lenta en ese "binomio"
ResponderEliminarA partir de ahí (sin sobrepasar esas velocidades de 1/10" o 1/15") el juego está en el diafragma, compensando hacía arriba o hacia abajo, según te interese para resaltar luz o intensificar penumbras.
Siento no saber explicarme mejor o haberte inducido a esa conclusión.
Cualquier dia quedamos por esos montes y lo probamos, que es la mejor manera.
Un abrazo,
La particularidad es que la parte técnica está bastante acotada a jugar en un estrecho margen entre velocidad y diafragma: medio paso de más o de menos en una u otro y te pasas o no llegas, pero no deja de ser una apuesta de valores en la que todos andamos en igualdad de condiciones.
ResponderEliminarPero dado que esto de la fotografía es algo más que valores numéricos me agarro al resto del post: composición. Y ahí sí que se abre un mundo de posibles.
El agua como protagonista principal o único, como actor secundario, mostrando su entorno, jugando con la luz y las maravillosas sombras que menospreciamos a veces, desenfoque, formas y volúmenes…
Aquí es donde, en mi caso, siempre me quedo con ganas de más, mis ojos acostumbrados a mirar el paisaje en angular le cuestan ‘ver’ una escena en espacios reducidos, y ahí en el juego de unos mm. de focal se me escapa esa segunda foto tuya, sencillez, sí, pero hay movimiento, luz, líneas, volúmenes, sombras. Habrá que seguir buscándola.
Pd. No sabes lo que se agradecen este tipo de entradas que dan pie a algo más que cosechar parabienes.
Saludos
No sé Antonio.... puedes dar toda la explicación técnica que quieras...
ResponderEliminarPrefiero creer y seguir convencida de que haces magia con tu cámara.
Tus paisajes son de los mas bellos y jamas dejas de sorprenderme y estoy segura que es porque le pones el alma, el corazón y la vida. Toda tu sensibilidad en tus imágenes.
Gracias por transmitir a traves de ellas un poco de paz y belleza que todos necesitamos.
Un saludo muy afectuoso.
Pues habrá que ponerse manos a la obra y ahora mismo se me acuerda mi ultimo intento sedoso allá en el Cares... tengo que revisar a ver que es lo que ha salido.
ResponderEliminarNo quemar el agua es en parte bastante complicado, en cuanto a composicion pues esto es como lo de las hamburguesas completas, que a mi me gustan sin tomate, sin lechuga, sin pepinillo, sin cebolla y sin panceta... (Otros le ponen mas ingredientes, claro)
Anotado el binomio en el cuaderno de campo en prevision de proximos intentos, sobre todo ahora en esta epoca que el agua se desborda por todas partes.
Si si si, voto por estas entradas que se abren al debate y a la opinion y experiencia personal, en las que uno no se ciñe a que bonito es todo y que maravilloso mundo de luz y color, independientemente que las fotos que pusiste son una gozada, la envidia de mi tarjeta jajaja
Biquiños :)
Yo me quedo con la idea de los encuadres cerrados. Muchas veces buscamos la grandiosidad del paisaje y desaprovechamos las posibilidades de un detalle, de un encuadre corto, del propio agua y sus luces y sombras, en fin que has dado en el clavo.
ResponderEliminarUn abrazo