Yo diría que un estado en el que ni las preocupaciones (tan de nuestro tiempo), ni los agobios, angustias, miedos o dolor perturben el sencillo hecho de simplemente vivir.
Nos afanamos y vamos como locos tras.... que? Si nada importa verdaderamente como el sentirse tranquilo porqué romper ese estado?? Para que sirve el momento fugaz de haber conseguido algo cuando ello se ha llevado, como una riada, lo verdaderamente importante: nuestro estado de vida.
Nos olvidamos a menudo de lo corto de ésta puñetera vida y dejamos de disfrutarla en lo mas sencillo para complicarnosla de mala manera.
O nos la complican y no somos capaces de desengancharnos, de pasar de políticos, de afanes ajenos que nos hacen sentir como propios, de consignas generalmente vacías que nos venden como articulos de fé.
Quizas ahora, con el paso de los años, uno va teniendo la suficiente experiencia como para distinguir lo que verdaderamente importa. Y, desde luego, la paz sería lo único indispensable, aún por encima de la salud -tan cacareada- si somos capaces de asumir que finalmente tenemos que morirnos, pero morirnos en paz, al menos.
Joder tio, que quietud, que preciosidad, que procesado...enhorabuena. Un abrazo.
ResponderEliminarAgustín.
Vaya modo de transmitir en una imagen lo que necesita tantas palabras. Es cierto, cuando se sabe lo que se quiere decir, a veces, con una imagen queda dicho de sobra.
ResponderEliminarEste es el caso.
Abrazo
Me gusta mucho, transmite aquello que pretendes y ampliada es todo un lujo
ResponderEliminarRecuerdo un fragmento de La Caverna, de Saramago, que dice "La vida es así, está llena de palabras que no valen la pena, o que valieron y ya no valen, cada una de las que vamos diciendo le quitará el lugar a otra más merecedora, que lo sería no tanto por sí misma, sino por las consecuencias de haberla dicho."
ResponderEliminarDesde luego a tal aseveración no le sobra ni una sola letra.
Preciosa imagen y gran entrada.
PAZ
ResponderEliminaruna palabra debería ser suficiente
Que bien expresado Antonio, que bien expresado :)
ResponderEliminarY que bueno también que ya estes aqui :)
Asi vistas tus ultimas fotos, jope, contigo sería un problema tener que escoger jajajaja, pero yo, en este caso, me quedaría "Golfeando" durante horas con esa puesta de sol :)
Bienvenido!!!
Biquis :)
La imagen para deleitarse con ella durante un buen rato... esas pequeñas colinas y las diferencias de tonos entre ellas... una pasada. Sobre la reflexión: decir que siempre habrá alguien que sobre la laguna estará dispuesto a tirar la piedra que rompa esa quietud y armonía... la gente es así.
ResponderEliminarUn abrazo
Qué maravilla de foto. Qué paz transmite. Ella solita expresa lo que tan bien has escrito. Si es que la fotografía es lo que tiene..
ResponderEliminarUn beso Antonio
Esta excelente fotografía lo dice todo...que paz!
ResponderEliminarMuy bueno el tratamiento.
Saludos.
Ramón.
Es que nos lo ponen muuuuy difícil Antonio. Complicado el abstraerse de los problemas, propios y de los que ves al rededor. Yo lo intento, perno pocas veces lo consigo, lo confieso.
ResponderEliminarTal vez una huida a algún paraíso cercano (recuerdo tu querido Lanzarote, pero si me lo permites me quedo en El Hierro), seguramente menos mediático, menos dimensionado que una gran ciudad. Madrid resulta asfixiante por momentos.
La foto, cojonuda, sin más, pero es que es una delicia el monocromo, tan suave, lleno de tonalidades y matices
La Albufera es lo único que queda de paz en toda la costa (o casi)
Un fuerte abrazo
La perspectiva, esa tan importante en la fotografía..., como en la vida.
ResponderEliminarEl tiempo es que da una perspectiva real a la vida, con los años..., por fin vamos viendo el bosque, y no los árboles ;)
Bien elegigo el título de la entrada para semejante foto. Por cierto que tenías razón con la confirmación de los comentarios y lo he quitado. Si no entra spam así se va a quedar. Un coñazo menos, vaya.
ResponderEliminarUn saludo